Tendencias de mercado y normativa

El mercado de los gases refrigerantes está cambiando. Las modificaciones en la legislación de los refrigerantes flourados está abriendo un nuevo escenario de búsqueda de gases alternativos o sustitutos, también llamados gases naturales. En un mercado en el que comenzaba una competencia entre los gases fluorados tradicionales y los sustitutos, también se ha abierto un nuevo frente: la competencia entre los propios gases sustitutos. Por ello, tomando como referencia la ponencia realizada por shecco en el congreso Tecnofrío ’18, vamos a analizar el futuro de mercado y legislativo de dos gases sustitutos: el CO2 y el amoniaco (NH3).

Gases de futuro

El amoniaco ha sido, durante más de un siglo, el refrigerante de referencia en el ámbito de la refrigeración industrial. Pero las tecnologías basadas en el CO2 y en el amoniaco de baja carga parecen estar poniendo en jaque dicha hegemonía. Además, esta nueva vertiente de amoniaco de baja carga está siendo considerada para sectores donde tradicionalmente no ha sido usada, como sistemas de climatización centralizados o en tiendas pequeñas que requieren menor carga de refrigerante. Asimismo, el CO2 transcrítico está abriéndose sobre todo en la refrigeración comercial, con 12.000 supermercados en Europa y un total de 15.300 en todo el mundo.

Evolución del mercado del CO2

Según una encuesta realizada por shecco en el año 2016, la Unión Europea es, con diferencia, la más avanzada en aplicaciones de CO2 en refrigeración comercial e industrial. Esto se debe principalmente al novedoso Reglamento de gases fluorados, que quiere apostar por refrigerantes más respetuosos con el medio ambiente. Esto ha supuesto un impulso para que las empresas innoven e inviertan en tecnología fiable para el futuro. Y también una ventaja competitiva para Europa con respecto al mercado mundial, que cobrará aún más importancia medida que otras regiones actualicen su normativa y reduzcan su dependencia de los HFC.

Refrigeración comercial

El CO2 se ha convertido por tanto en una tecnología estándar en nuevos sistemas para importantes minoristas europeos. En el ámbito tecnológico, los sistemas de refrigeración de CO2 se están evolucionando hacia un diseño más compacto, de sencilla instalación y fáciles de usar. Por otro lado, su gran disponibilidad y estandarización ha supuesto un abaratamiento en los costes de dicha tecnología, lo cual es también un aspecto positivo.

En los últimos tres años, se ha visto un crecimiento significativo en el número de sistemas de CO2 transcríticos (TC) en todo el mundo, especialmente en América del Norte y la región APAC (Asia-Pacífico). Gracias a los datos facilitados por fabricantes y proveedores de equipos de esta índole, Europa experimentó el mayor crecimiento en números absolutos, añadiendo más de 9,000 tiendas de CO2 TC, y llegando a aproximadamente 14,000 tiendas a principios de 2018. Por su lado, Estados Unidos es la potencia de mayor crecimiento relativo, y Japón es el país más grande para CO2 TC del mundo. España también ha aumentado en más de diez veces el número de tiendas que tenía en 2013, llegando a 67.

Por lo tanto, el aumento general de instalaciones de sistemas de refrigeración de CO2TC en Europa es notable y se espera que tenga un crecimiento exponencial continuo en el futuro. El crecimiento se estima en 6.000 nuevos sistemas por año, traduciéndose en un número considerablemente elevado de tiendas de CO2 para 2020. Esto quiere decir que las barreras de la falta de conocimiento están siendo superadas, y que la tecnología se está asentando en el mercado.

Refrigeración Industrial

Junto al crecimiento en la refrigeración comercial, los sistemas transcríticos de CO2también se están abriendo paso en aplicaciones de refrigeración de ámbito industrial, que requieren elevadas capacidades de enfriamiento. Numerosos ejemplos de Europa demuestran el aumento de competitividad de estos sistemas en la industria, como puede ser el sistema transcrítico de CO2 más grande del mundo instalado en los Países Bajos en 2016.

Los avances tecnológicos, especialmente en los compresores, han permitido que los sistemas TC de CO2 alcancen capacidades más altas. El segmento industrial está apostando por sistemas de CO2, en parte debido a la seguridad y los desafíos técnicos de usar amoniaco. Según los ingenieros expertos, los compresores de CO2pueden tener una vida útil igual a la del amoníaco sin la necesidad de componentes específicos y más caros.

A medida que mejora la tecnología, la distinción entre la refrigeración comercial e industrial se está volviendo menos clara, y la competencia entre las diferentes soluciones de refrigerantes alternativos está aumentando.

Evolución del mercado del amoniaco (NH3)

En la actualidad, más del 90% de las plantas industriales en Europa usan amoníaco como refrigerante. El amoníaco está presente en cervecerías, bodegas, pistas de hielo, plantas químicas, embarcaciones pesqueras, calefacción y refrigeración urbana y aire acondicionado a gran escala para edificios de oficinas, universidades y aeropuertos, además de en el procesamiento de alimentos, el almacenamiento y la distribución en frío.

En este contexto, los sistemas de amoníaco de baja carga (NH3) están creciendo con fuerza en la refrigeración industrial, sustituyendo a los tradicionales sistemas de grandes cantidades de amoníaco y HFC. Este cambio se debe a la mayor seguridad derivada de la reducción de carga de refrigerantes necesaria, mayor eficiencia, fácil mantenimiento y un retorno de inversión rentable y atractivo para el usuario final.

No es sorprendente que la convergencia de los objetivos de eficiencia energética, de reducción de la carga de amoníaco y de emisiones de carbono haya dado lugar a la proliferación de tecnología de amoniaco de baja carga en diversos lugares del mundo. El sector agrícola de Australia figura como uno de los referentes, así como en la región APAC, Japón o China. Y, aparte de la aplicación industrial, también los minoristas el amoníaco también se está introduciendo en el sector de la refrigeración comercial y los minoristas.